Los Corrosivos, banda post-punk de los 80 originaria del conurbano sur bonaerense, emerge en el contexto actual de la escena musical. Fellini, líder de la banda, relata su historia sin idealizarla en el libro “Los Corrosivos 1984-1989”, publicado recientemente por la editorial Piloto de Tormenta.
La historia de Los Corrosivos se entrelaza con la del post-punk, resurge en la actualidad debido al renacimiento del género. A pesar de ser casi desconocidos en su época, hoy cobran relevancia por su búsqueda musical experimental y su afinidad con el punk, sin perder su singularidad.
Inspirados por bandas como Joy Division y Killing Joke, Los Corrosivos se destacaron en festivales y el Centro Parakultural en los años 80. Su mayor logro fue la grabación del cassette “Estudios de casos” para Catálogo Incierto, sello de Daniel Melero, lo que les permitió dejar un registro sonoro de su música.
A diferencia de otros grupos de la época, Los Corrosivos no dejaron un legado de vinilos, pero su cinta en Catálogo Incierto los convirtió en una leyenda urbana. El libro de Fellini arroja luz sobre esta banda y su impacto en la escena post-punk argentina.
Las memorias de Fellini, narradas en más de doscientas páginas, ofrecen una visión cruda y sin nostalgia de los años 80 en Argentina. Su relato aborda el contexto político y económico adverso, así como las dificultades que enfrentaron como banda. Las críticas y observaciones de Fellini sobre su propia banda son directas y a menudo sarcásticas.
El libro no se limita a Los Corrosivos; también destaca otros eventos de la época, como las visitas de The Cure y Siouxsie and the Banshees a Buenos Aires, la apertura del Parakultural y la creación de la Organización Negra, que más tarde se convertiría en De la Guarda y Fuerza Bruta.
A pesar de las autocríticas y las descripciones crudas de sus conciertos, Fellini muestra un respeto evidente por el legado de Los Corrosivos y su papel en la escena musical. La relevancia de la banda es más evidente hoy, cuando el post-punk experimenta un renacimiento. El libro, bien narrado y sólido, añade una nueva dimensión a la historia del rock argentino.