Y nunca te he de olvidar
en la arena me escribías
el viento lo fue borrando
y estoy mas solo mirando el mar.
Que lindo cuando una vez
bajo el sol del mediodía
se abrió tu boca en el beso
como el damasco lleno de miel.
Herida la de tu boca
que lastima sin dolor
no tengo miedo al invierno
como tu recuerdo lleno de sol.
Quisiera volverte a ver
sonreír junto a la espuma
tu pelo suelto en el viento
como un torrente de trigo y luz.
Yo se que no vuelve mas
el verano en que me amabas
que es ancho y negro el olvido
y entra el otoño en mi corazón.