Siempre que voy a salir
me blindo de precaución
porque sé que afuera es una jungla
donde el que no es cazador es presa
y las fieras zumban.
En quién confiar
atento a una señal
camino con cuidado
porque no quiero ser
el próximo bocado.
Y es cierto que hay que estar
alerta y preparado
para enfrentar peligros
que nos puedan lastimar.
Pero siempre puede haber
en vilo y acechando
tiburones en el bosque
y zorros en el mar.
Nunca intento descubrir
brujas donde no las hay
pero prefiero no dar ventajas
a un depredador vestido de ángel
y ofreciendo alhajas.
¿Cómo saber?
Es que tanta previsión
no impedirá encontrarnos
engaños y traición
donde menos esperamos.
Y es cierto que hay que estar
alerta y preparado
para enfrentar peligros
que nos puedan lastimar.
Pero siempre puede haber
en vilo y acechando
tiburones en el bosque
y zorros en el mar.
Me dicen en tono acusador
que estoy pecando de previsor
que tanta cautela no tiene caso
y que la prudencia es hija del fracaso.
Y claro que hay que arriesgar
saltar por arriba del muro.
Un barco en el puerto está bien seguro
pero fue hecho para navegar.
Y no sé si me encontraré
con un hada o un dragón
pero por las dudas llevo conmigo
varias flechas
y una flor.
Y es cierto que hay que estar
alerta y preparado
para enfrentar peligros
que nos puedan lastimar.
Pero siempre puede haber
en vilo y acechando
tiburones en el bosque
y zorros en el mar.