Después de tanto andar,
decidiste irte antes.
Duermen las sirenas pero no hay paz,
mientras me hundo en nuestro sueño,
y ahí estás.
Jamás seré igual,
avanza el cosmos, lento,
creo en mis pies tan firmes.
Tras mis ojos veo fluir la luz,
descubro que lo bello
que hallo en vos, se nutre en mí.
Después de tanto andar,
decidiste irte antes.
sabrás, justo al partir,
felicidad no es premio,
es consecuencia de vivir.