Tengo ganas de jugar
y apuesto al juego de ganar.
Apuesto un diente, apuesto un flan,
soy ocurrente al apostar.
Me la juego y pierdo un dedo.
No tengo amigos, yo me lo debo.
En cada carta apuesto más
¡cómo me gusta mi enfermedad!
Lamento el auto que perdí.
Lamento todo lo que no gané.
Me juego a mí mismo y me apuesto al sol.
Soy muy apuesto y apesto de la manera en que llevo mi vida a la ruina de no saber que hacer en el día mas que apostar.