El segundo disco de Zas marcaría el final de la dictadura y el retorno a la democracia. Varios temas de este trabajo resultaron un éxito, pero nos quedamos con el que le da título: «En la cocina, huevos».
Buenos Aires, año 2015
Si a un adolescente de estos tiempos, le contáramos que hace 30 años Miguel Mateos tenía que usar un eufemismo y decir «en la cocina hacen falta huevos» en lugar de su real intención «en la Argentina hacen falta huevos», probablemente al principio no lo creería y después se burlaría por lo naif de la situación.
Por supuesto, tendríamos que explicarle a ese adolescente que el país estaba saliendo de la dictadura más feroz de su historia, donde muchas palabras, y sobre todo muchas ideas, estaban prohibidas. Y en el regreso de la democracia en 1983, uno de los artistas que empieza a brillar con luz propia es Miguel Mateos.
Luego de un primer disco prolijo llamado «Zas», con un tema destacado como «Va por vos», llegó el segundo álbum titulado «Huevos». «Lo que más recuerdo es lo difícil que fue grabarlo, por la madrugada, y si había lugar. Fue en los viejos estudios de Music Hall, pero aun así salió un disco antológico que prueba que a veces la carencia te hace poner más huevos, justamente» recuerda el músico.
El tema que dio nombre al disco es una mezcla de imágenes familiares y cotidianas (mamá, papá, el novio, la tía Inés, y el sueño eterno de un marido fiel), el histeriqueo femenino («el juego de ya no me toques y por dentro te estás muriendo porque te toque») y la crítica social («…la lucha es desigual, hoy te convocan a la plaza y mañana te la dan»). «Mis primeras canciones, que escribí entre 1980 y 1983, eran un discurso muy fuerte debido a la dictadura militar» cuenta Miguel.
Mateos manda un mensaje también a las radios: «Si pasan música nacional no es que se hayan dado cuenta que la cultura de un país está en su gente» haciendo referencia a que tuvieron que recurrir al rock nacional, no por convicción o gusto musical, sino por la prohibición de pasar música en inglés luego de la guerra de Malvinas.
El disco se editó en 1983 e incluye canciones que se convertirán en súper éxitos de Mateos como «Un poco de satisfacción», «Extra, extra», «Un gato en la ciudad» y la propia «Huevos» por supuesto, que luego serían la base de «Rockas vivas», su disco en vivo que convertiría a Mateos en uno de los músicos más vendedores de la historia.
Ficha técnica:
Autor: Miguel Mateos
Intérprete: Miguel Mateos/Zas
Integrantes: Miguel Mateos (voz, guitarra, teclados), Pablo Guyot (guitarra), Fernando Lupano (bajo) y Alejandro Mateos (batería)
Álbum: Huevos (1983)
Duración: 3 min. 49 seg.
Letra
Bachillerato pedagógico
y el carnet de un club vecino.
Una estampita, por las dudas
que el novio se pase de vivo.
La imagen de mamá y papá
en cama.
Un póster de Jagger
y un Cristo retratado
harto estar colgado.
El sueño eterno de un marido fiel,
o que al menos te haga el verso.
La desgracia de la tía Ines
que a los 16 se fue con un marinero griego.
El juego de Ya no me toques,
y por dentro, te estás muriendo
de que te toque.
Nena vas a ver cuando esta noche
llegue a casa papá.
Oh oh oh oh.
Huevos.
En la cocina hacen falta huevos.
Huevos
El mundo es tan atroz.
Huevos
En la cocina hacen falta huevos.
Yo se que, a pesar de todo,
la lucha es desigual.
Hoy te convocan a la Plaza
y mañana te la dan.
Si pasan música nacional
no es que se hayan dado cuenta
que la cultura de un país
está en su gente
y yo sé que aquí hay polenta.
Nena vos creías
que con la BCG
se acabaría el drama de tus días.
La vida es algo más.
La vida es algo más.
Huevos.
En la cocina hacen falta huevos.
Huevos.
En la cocina hacen falta huevos.
Huevos.
En la cocina hacen falta huevos.
Huevos.
No más violencia.
Quiero energía, más inteligencia.