El argentino es amigo, le gusta convocar, improvisar y disfrutar cada encuentro como si fuese el primero y último en su vida. Pospone cualquier plan si lo llaman diciendo: “falta uno” para jugar a la pelota, aunque esté en la otra punta del mapa. Es fanático de lo que sea, política, fútbol, una canción, una remera o un corte de carne. Le encanta etiquetarse de aventurero, aunque repita las mismas costumbres sin cansarse. Tiene sangre pícara e intuitiva, su segundo nombre es competidor y siempre encuentra una buena oportunidad para decir: “¿Cuánto te apuesto a que…?”. Se destaca por su curiosidad y por eso sabe de todo un poco. Y si no lo sabe, lo inventa.
Podría decirse que el plan más argento de todos es juntarse a comer un asado. Y no es simplemente juntarse con amigos o familia a comer carne cocida a las brasas, es una especie de ritual que tiene un cierto orden cronológico dentro del desorden. Porque apenas cae el último rayo de sol de la tarde, empiezan a llegar los invitados. El dueño de casa, ya con el fuego prendido, prepara la carne mientras unos se encargan de cortar queso, salame y pan para la picada y otros acercan las bebidas que, difícilmente, salgan de estas tres opciones: cerveza, vino o fernet. En ese orden. También está el que no hace nada y, por supuesto, el que siempre llega tarde, pero trae el hielo.
Una vez todos reunidos, de manera involuntaria se forma una especie de ronda cerca del fuego, donde cada uno de los que participa tiene un tema de conversación que lo representa, como el que no puede evitar mencionar la política, el que repite los mismos chistes y anécdotas de siempre mientras los demás responden con carcajadas como si fuera la primera vez que lo escuchan. El apasionado de los autos, que recién cambió de modelo y ya está pensando en el próximo, el runner, que comparte el tiempo en el que hizo los 18 kilómetros que corrió antes de llegar al asado y el infaltable espectador, que no se sabe mucho de su vida, pero siempre está.
Existe un tema en particular que no puede faltar bajo ningún punto de vista, y es el deporte. El fútbol se lleva el primer puesto indiscutido. Aunque, desde que apuestan resultados online en bet365 registro Argentina, se multiplicaron los fanáticos de todo. Porque además de disfrutar los beneficios de registrarse en esta plataforma de juegos de apuestas deportivas y casinos, cada uno encontró la forma de ganar: no solo quienes saben más de deportes que las novedades en su familia, sino también los estrategas y, por supuesto, quienes andan con suerte.
Todos estos temas siempre van bien acompañados por la estrella del grupo que, en su adolescencia, le dedicó el tiempo que otros no a aprender a tocar el instrumento más argento de todos, la guitarra, e interrumpe cada tanto con un clásico de fogón. O, en su defecto, se ocupa de poner música a lo largo de la noche, compartiendo su playlist con todas las novedades que trajo del Cosquín Rock 2023.
Cada integrante del grupo es, sin dudas, una pieza fundamental e indispensable para que el ritual se sostenga a lo largo del tiempo. Y, a pesar de las diferencias entre unos y otros, hay algo que define al argentino por sobre todas las cosas, y es su capacidad de disfrutar. De lo que sea, como sea y donde sea. Y aunque seguramente haya muchísimas cosas por mejorar, qué lindo es ser argentino.