Ayer,
la sonrisa de un niño me hacia feliz;
hoy,
nada de eso me queda a mí para creer.
Mañana,
del mañana que puedo esperar,
solamente
amor o soledad.
Mañana,
cuando ya esté muy viejo y cansado,
no podré mas pensar en mañana
pues futuro no habrá para mí.
Ayer,
el perfume del viento me hacia soñar;
Hoy,
nada de eso me queda a mí para creer.
Mañana,
del mañana que puedo esperar
y quién sabe
qué puedo encontrar.
Mañana,
cuando todo ya esté tan lejano,
no podré recordar el pasado;
pues mi mente no se acordará.
Mañana,
del mañana que puedo esperar
y quien sabe que puedo encontrar,
del mañana que puedo esperar.