La cantante y compositora Marina Casas lanza su segundo disco, Cicatriz activa, una obra de diez canciones en la que vuelve a explorar temas como el amor, el desamor, la salud mental, la soledad y el dolor, siempre con su sello de humor y sarcasmo característicos.
Este álbum se destaca no solo por su propuesta temática sino también por el uso del tap como un instrumento percusivo en cinco de sus canciones, un recurso poco común en el pop y el rock que añade una dimensión nueva a la escucha.
“Cicatriz activa” marca un avance en la experimentación de Marina hacia sonidos de pop rock, synth pop y electro indie, en un estilo que combina elementos alternativos y logra destacar el carácter único de sus letras. La artista argentina –cantante, bailarina, directora y psicóloga– comenzó su proyecto musical en 2019, fusionando tap, poesía y música. Desde entonces, ha ido moldeando una estética que se materializó en su primer disco, Semblantes, lanzado en 2020, y en el EP Monstruos, de 2021, ambos con letras que exploran temáticas profundas y disruptivas.
Casas también realizó en 2021 el live session No me da lo mismo, un formato audiovisual que puso énfasis en la palabra y el ritmo, interpretado en formato de banda. Durante los últimos años, la artista ha llevado su propuesta en vivo a distintos ciclos culturales y bares, presentándose en diversas configuraciones junto a músicos en dúo o trío, acompañada de guitarra, teclado y batería.
En Cicatriz activa, grabado y lanzado en 2024, Marina continúa su línea de experimentación fusionando el tap con un estilo synth pop y electro, mientras ofrece una narrativa lírica sólida y potente que permite ver una nueva faceta de su trayectoria artística.