Luego del alejamiento de su guitarrista Ricardo Serra, Virus encaraba una nueva etapa. En diciembre de 1984 se preparaba para presentar su nuevo álbum, Relax, en el Teatro Astros, marcando una etapa de consolidación artística y madurez. En esta entrevista que rescatamos de la Revisa Pelo, Federico Moura expresaba su satisfacción con esta producción más ordenada y experimental, donde priman el trabajo con luces y la concentración en la música misma.
Virus: la hora del relax
El cuarto fin de semana de diciembre, Virus presentará en concierto «Relax», su último trabajo discográfico. En esta nota, Federico Moura comenta el nuevo álbum, y detalla sus actuales necesidades artísticas y las de su grupo, ahora reducido a quinteto tras el alejamiento del guitarrista Ricardo Serra.
Rescate de una entrevista publicada en la Revista Pelo Nº228, noviembre 1984.
Federico Moura, compositor y (voz) cantante del grupo Virus, piensa que su defecto es el de «ser demasiado sensato en un país tan insensato como este», que «mucha gente ya se murió y no se dio cuenta», que «es absurdo pensar que lo popular tiene que ser malo» y que «la gente joven es la que ,está más en contacto con la realidad», porque puede «descubrir las cosas como son y no la mentira empaquetada que se come tanta gente». En diálogo con Pelo recuerda que Virus empezó a tocar en enero de 1981 y que en diciembre de aquel año salió su primer LP, «WaduWadu»; en diciembre de 1982, «Recrudece», y un año más tarde, cronométricamente, «El agujero interior». Ahora, los días 21, 22 y 23 del corriente el grupo presentará en el teatro Astros su cuarto LP, «Relax».
Federico Moura: «Para este LP partimos de elementos técnicos ya claros. Fue una producción más ordenada. Trabajamos mucho sobre la marcha. Grabamos 280 horas. Eso tiene que ver con el hecho de estar arreglando en el estudio. Ganás frescura e intensidad en alguna medida, pero al mismo tiempo es arriesgado, porque no tenés tiempo de chequear. Lo que está, está. Yo siempre creo que terminar un LP y mezclarlo, y al mes volvés a mezclarlo, es lo mejor. Pero hay reglas de juego. En este caso hay una compañía que tiene una fecha de lanzamiento de su producto.»
¿Qué diferencia notás por comparación con el LP anterior?
El LP anterior tenía una onda más rockera. Pero cuando los Peyronel (sus produc tores) aparecieron en escena, nosotros ya teníamos todo el material hecho. Lo que pasa siempre con Virus es que se le está buscando el lado flaco para darle. El LP estaba absolutamente terminado. Dijimos entonces: » ¿Quién puede producir este sonido? ¿El que produce a María Martha Serra Lima? No.» Entonces pensamos en alguien que produjera un sonido de rock, y ese fue Danny Peyronel, que logró lo que en ese caso necesitábamos. Para nuestro más reciente LP queríamos otra cosa, y estoy más conforme que nunca.
¿Los integrantes actuales del grupo son los mismos que los de la grabación?
Se fue Ricardo Serra. Ahora somos Mario Serra, Enrique Muguetti, Marcelo Moura, Julio Moura y yo. El disco lo grabamos los cinco. Ricardo, en un momento, no tuvo claras las cosas. Aunque no grabó lo dejamos en la tapa del disco porque pensamos que iba a seguir con nosotros. Pero después decidió no tocar.
¿Van a montar alguna escenografía para la presentación, ustedes que fueron pioneros en esto?
No. Al mismo tiempo somos los pioneros en dejar eso. Vamos a trabajar especialmente con luces. El acento va a estar puesto en la música y en nuestra intervención.
¿Cómo viviste las épocas en que no te supieron comprender del todo?
Fijate que curioso: si hay algo que recibí de mi público fue afecto absoluto. He recibido críticas malas, sí, pero son tan pequeñas al lado de lo otro. . . La gente que nos seguía era tanto más fuerte y más interesante que una crítica mala. Al mismo tiempo, no me alimento de las notas buenas. No es que me importen un pito las notas, sino que les doy la medida justa. No me invaden la cabeza, ni me siento genial cuando alguien me dice: » ¡Qué genial!» Soy bastante sensato, no tengo quince años, y estoy bastante curtido. Mi defecto es ser demasiado sensato en un país tan insensato como éste.
¿Te interesa tener más público que el que te sigue?
Mucho más, acá y fuera del país. Me gustaría tocar para más gente, ir a diferentes lugares, vivir en diferentes lugares. Nunca supe muy bien por qué, pero siempre me fui del pais por algo claustroto bico, a vivir un año en Nueva York, un año en París, en Londres o en Brasil. Adoro que no existan las fronteras, y tener una pasión con alguien de otro mundo; eso me fascina. Estoy lejos de ser eli tista. Es absurdo pensar que lo popular tiene que ser malo. Es un concepto que le sirve a Sofovich para vender esas películas bochornosas que hace. Hay mucha gente que ya se murió y no se dio cuenta. y son posiblemente los que van a ver esas películas. Alguna vez no entendí muy bien qué significaba tocar para gente muy joven, pero llegué a la conclusión de que es lo mejor que me puede suceder. Porque es la más lúcida, la más fresca de cabeza.
Sé que estás conectado con actividades artísticas de otro tipo. ¿Cómo vinculas la música con ellas?
Siempre estuve en contacto con la pintura. Voy a exposiciones y disfruto mucho. Trabajo mucho a partir de los colores. Pienso en un color o en una imagen antes de componer una canción. Es una sensación primitiva absoluta. Yo no creo tanto en la inspiración como en la concentración.
Componés a partir de sensaciones. ¿Cómo vivís?
La única forma lógica de vivir es descubrir lo que te gusta y tratar de hacerlo. Descubrí desde muy chico que me gustaba la música, y mi familia fue bastante piola: me dejó elegir. Vivo intensamente y hago lo que quiero. Si yo hubiera seguido los consejos de mucha gente acerca de la música, no hubiera hecho nada. Hubiera sido un reprimido y hubiera pensado en tener una posición lo antes posible. Por suerte, mi cabeza me dio para saber lo que quería. No concibo la vida inhi bida. Me gusta explotar. Quie ro llegar a viejo gastado.
Febe Defelipe