El modelo saltó a la fama gracias a Thom Yorke y su último disco solista, pero ya está abierto para cualquier artista, productor o programador.
En medio de la polémica entre Spotify y Taylor Swift por los montos a repartir, la empresa californiana BitTorrent, Inc. anunció la apertura de este modelo de negocios con un argumento casi imbatible: el artista se queda con el 90% de las ganancias generadas.
La propuesta es que los creadores vendan paquetes freemium: canciones gratis y contenido extra de pago, que podría ser más música, videos, apps o lo que el productor considere interesante para sus fans. Es que la propuesta no es solamente para música, sino también para libros, películas, software o lo que se adapte.
Matt Mason, el director de contenido de BitTorrent, lanzó la herramienta enfatizando el control que mantiene cada artista sobre su propia obra: “Taylor Swift provocó un debate sobre el estado de la música en las últimas semanas; el valor de un stream, el valor de un álbum. El valor del arte no debe ser un tema de debate. Debería corresponder a los artistas. Nuestro objetivo con BitTorrent Bundle es restablecer el control de los creadores. Estamos abriendo aplicaciones a todos los publishers: permite a los artistas vender contenido directamente a los fans, en sus términos, mientras se mantiene 90% de los ingresos por ventas”.
En menos de dos meses Thom Yorke consiguió más de 4 millones de descargas de “Tomorrow’s Modern Boxes”, su segundo disco en paralelo a Radiohead. La expectativa ahora está centrada en conocer cómo responderá la plataforma para artistas menos masivos.