Me escapé de los motivos que la vida
impone como alternativa o vocación
a los supuestos «ciudadanos libres»
y más a los indefinidos como yo.
Quiero que mi alma sea vaga
y no trabaje para nadie
tan poca cosa somos
pero que importante nos creemos.
Eso no lo pienso discutir.
Me incliné al desfilar por la cornisa
entre el abismo mental y la sumisión
que se alimenta de jóvenes fuertes
pero no traga indefinidos como yo.
Quiero que mi alma sea vaga
que no trabaje para nadie.
Tan poca cosa somos
pero qué importante nos creemos.
Eso no lo pienso discutir.
El camino del mal paga a largo plazo
pero pide mucha inversión.
El patrón pacta con ambas partes
siempre sale ganador.
Sabotee la crueldad y la hipocresía
que reina entre la burocracia en general
y que utiliza teleoperadores
persiguiendo a indefinidos como yo.
Quiero que mi alma sea vaga
que no trabaje para nadie.
Tan poca cosa somos
pero que importante nos creemos.
Eso no lo pienso discutir.