Muchas veces he escuchado:
“yo lo habría hecho mejor”.
Esa historia del pasado
como un cuento de terror.
He perdido mucho tiempo
esperando una señal,
pero es mentira porque sé bien quién sos
y sospecho que esto va a ser siempre igual.
Y en tu cara puedo ver risas
y, en la oscuridad, rocanroles de papel
que nunca vas a escuchar.
No tengo nada que perder.
Muchas veces he soñado
que vendrías hoy por mí.
Es tarde para arrepentirse
y sabes que este juego
yo ya no lo juego más.
Y en tu cara puedo ver risas
y, en la oscuridad, rocanroles de papel
que nunca vas a escuchar.
No tengo nada que perder.
Y en tu cara puedo ver risas
y, en la oscuridad, rocanroles de papel
que nunca vas a escuchar.
No tengo nada que perder,
nada que ganar, nada que ganar,
nada que ganar.