Cuando al hablar movía sus manos
como los granos que danzan al sol
A iluminar, su piel, meridiano,
traza los días en dos
Salva al mundo en tu cintura
guárdame de mí
Ríete con tu hermosura
viéndome venir
Háblame así, sin decir palabra
déjame que abra mi pecho hacia ti
Tierra y marfil, azufre y turquesas
en tu cabeza dos flores de abril
Ponme febril si el mar te corteja
y no nos deja dormir
Salva al mundo en tu figura
piérdeme de mí
Dulce muerte que fulgura
haciéndonos vivir
Háblame así, sin decir palabra
déjame que abra mi pecho hacia ti.