Vi la foto del futuro
y no salías en el retrato,
hasta el espejo
miró para otro lado.
La vida es demasiado real para vos
y vos no sos la vida real.
Rogando estar en el medio,
te envenena tu propio remedio.
No tengo la culpa de los burros
que te hayan pateado.
Nunca empujé
a nadie que no fuera
a desbarrancarse
de cualquier otra manera.
Para empezar estoy libre otra vez,
haciendo lo que había que hacer,
el trabajo que en tus manos
te resultó demasiado.
No tengo la culpa de los burros
que te hayan pateado.