Hoy fui el oculista de la bestia
Y ví sus ojos bien de cerca
Sin usar palabras entendí
Llegamos juntos a un acuerdo
Sus pupilas sucias y viscosas
Más o menos decían esto:
¿Quién detona tu sien?
Quién no dice nada
Las bocas se empiezan a mover
Las miradas dicen bla bla
Prisioneros rezan conectados
Otros desnudos, adictos al Like it
La bestia hablaba demasiado
Por eso fui directo al grano
De su escondite me robé
Todos los datos necesarios
Para lograr vivir al fin
Sin nadie que me dicte