Para todos aquellos que fueron seguidores de Pastoral (el viejo), el dúo tenía una imagen, una voz y un compositor principal: Alejandro de Michele. Cuando sobrevino la separación, se produjeron las lógicas especulaciones alrededor del futuro de cada uno de los pastores. Como siempre ocurre, las apariencias engañan, y cualquier prejuicio sobre este primer disco solista de Miguel Angel Erausquin resulta errado.
El porqué de la demora en la edición de este disco figura entre los millones de interrogantes que la contradictoria industrial musical argentina atesora y Cultiva. Proyectado como el primer long play solista de Eurasquin, “Hacia la libertad” fue editado cuando éste había vudto a reunirse con Alejandro De Michele en una renovada versión de Pastoral.
“Hacia la libertad” sorprenderá a los seguidores de Pastoral y más aún a los que nunca se interesaron por la música del dúo. Lejos de Pastoral, Eurasquin consiguió hacer aflorar toda su capacidad musical y grabo un álbum simple, pero con momentos de gran nivel musical. La música es llana, un folk sin asperezas que por momentos se funde con inteligencia en melodías del folklore argentino y sudamericano. “Hacia la libertad” (de ne y “Desconfía de todos” (de Gieco) tienen un ritmo tipicamente folklórico, y el logro está en que la fusión se hizo naturalmente, sin forzar las estructuras armónicas. El primer tema en particular es una hermosa canción en la que la música alcanza a crear la atmósfera de tristeza y belleza que la letra describe.
Erausquin no es un excepcioaal letrista, pero algunos de sus textos están logrados y se entiende lo que quiere transmitir. El lo sabe y por eso prefirió decir las cosas de la manera más breve y más directa posible. Otro de los pilares de este álbum lo constituye el trabajo del tecladista David Impelluso, que también aporta una canción. Con el potencial compositivo ue Erausquin muestra en este Ábum se puede esperar lo mejor de Pastoral, o de lo que pueda hacer solo en el futuro.