El explosivo dúo funk se subió a las tablas del Luna Park con motivo del lanzamiento de «La Humanidad o Nosotros», su más reciente disco.
El explosivo dúo funk se subió a las tablas del Luna Park con motivo del lanzamiento de «La Humanidad o Nosotros», su más reciente disco.
Con entradas totalmente agotadas, los Illya Kuryaki volvieron a reunir en un ritual casi sagrado a diversas generaciones, que desde las 21.30 palpitaron parte de LHON. «Aleluya», primer corte del último material, comenzó a sonar con los músicos en escena cubiertos con túnicas de arpillera al estilo bíblico. Con los mismos atuendos, Dante Spinetta y Emma Horvilleur dieron vida una vez más al estadio de Avenida Madero.
«Gallo negro» y «Hombre Libre» dejaron en claro el crecimiento constante de IKV, pero como todo show, las más aclamadas siempre son las que remiten a un recuerdo o momento del pasado. Es así que luego de preguntar quiénes los seguían desde sus inicios, se transportaron velozmente con su magia al año 1997 con «Da Cosmos» y al 1995 con «Jaguar House». Luego, el momento retro se convirtió en popurrí con «Jugo/Latin Geisha/Guerrilla Sexua», tres grandes hits de los 90’s.
Como siempre el homenaje al número uno, dicho propiamente por Dante, se hizo presente de la mano de «Aguíla Amarilla», canción estremecedora que formó parte de «Chances» su disco-regreso. Para cambiar el clima retomaron a «Versus», detonando el suelo con «Expedición al Klama Hama», al cual le siguieron «Estrella Fugaz», «Los Ángeles» y «Espantapájaros», éstas dos últimas con la presencia de una bailarina clásica con un tutú, similar al famoso cisne negro de Tchaikovsky y un bailarín en el rol de espanta pájaro.
Continuaron haciendo bailar a sus fieles seguidores al ritmo de «Ula Ula», «En el Reino», «Helicópteros», «Chaco» y nuevamente un popurrí de «Funky futurista/Yacaré». Para el falso final al que acostumbran la mayoría de los artistas prepararon «Jennifer del Estero» y «Coolo» dos de sus más reconocidas canciones.
Como era de esperarse, no tardaron más de 5 minutos en regresar a escena, para interpretar las baladas que habían quedado en el tintero: «El Árbol Bajo el Agua», «Diciembre» y «Sigue». Aunque parece imposible levantar un show luego de temas tan emotivos, el dúo dinámico a consecuencia de su entrañable experiencia supo muy bien cómo manejar los altos y bajos. Es así como volvieron a enloquecer junto a «Ritmo mezcal» seguida de «África» a la cual combinaron con parte de «This is not America» del emblemático David Bowie y «Otro muerde el polvo», su propia versión de «Another one bites the dust», uno de los clásicos de Queen.
Para finalizar, luego de dos horas de show, entonaron otro de sus hits de «Chaco»: «Remisero» y la jocosa «Abarajame», que en la actualidad es probablemente uno de los himnos de la banda. El público satisfecho, el grupo realizado, el Luna Park desbordado, y una vez más, Illya Kuryaki and The Valderramas dejándolo todo.
Fotos de Mica Villalobos