El pasado viernes, Intoxicados inundó la Vieja Usina. Su líder, Pity Álvarez, confirmó que próximamente vivirá en Córdoba.
La banda local La 66 fue la anfitriona oficial del show de Intoxicados. Dicha banda, de influencias claramente stone, le puso música de fondo al incesante ingreso de público. Además, fue la encargada de inyectar una primera dosis de rock and roll que sirvió momentáneamente para calmar la ansiedad de los presentes.
Cuando el reloj marcaba las 23, las luces apagadas de la Vieja Usina anunciaban que en breve, el telón del escenario pasaría a un segundo plano. Y así fue. El inconfundible Pity Álvarez, junto a su inseparable guitarra, interpretaron las primeras estrofas de «El Rey». Así comenzó oficialmente un show en el que no sólo abundó el rock and roll.
Bajo el pedido explícito del líder de Intoxicados, ninguna bengala pudo ver la luz durante esa noche. Junto a ésa declaración, agregó que en poco tiempo vivirá en Córdoba y expresó el cariño que le tiene a la ciudad.
Pero fue recién con los primeros acordes de «Está saliendo el sol» que los jóvenes (muy jóvenes) que se hicieron presentes comenzaron a bailar y saltar, al tiempo que coreaban la tan difundida canción. A ella, en tanto, le sucedieron «Volver a casa» y «Un tema de mierda», todos del disco «No es solo rock and roll» (2003).
Como no podía ser de otra manera, uno que otro tema de Viejas Locas sonaron para alegría de muchos. «Lo artesanal», «Homero», «Intoxicado» y «Me gustas mucho» se escucharon al pasar, y la presencia de dos muñecas inflables en el escenario captaron por un momento la atención de todos.
Insinuando un final, que en realidad llegaría bastante después, Intoxicados interpretó «Poco a poco» y se retiró del escenario. Minutos después, regresó el guitarrista de la banda (Felipe Barrozo), quien interpretó el Himno Nacional y algo más, con sus ágiles y jóvenes dedos.
Temas después, y sin ganas de irse, la banda liderada por Cristian «Pity» Álvarez terminó su show con «Una vela» y «Una piba como vos». De esa manera, Intoxicados abandonó definitivamente las tablas y el publicó que se había congregado con ganas de escuchar buen rock and roll se fue satisfecho.