Años atrás, cuando se presentaban los Redonditos de Ricota uno podía estar seguro de que podía suceder cualquier cosa menos que reinara el aburrimiento. Ahora, con modificaciones en su formación, demostraron que eso sigue siendo cierto, este recital se convirtió también en una extraña combinación de música y de show del absurdo, apoyados en este caso por las Bay Biscuits que ya son un delirio por sí solas.
Pueden imaginarse lo que resultó de esto: no había tiempo para recobrarse de algún rock and roll furioso que ya el “animador” estaba improvisando un discurso delirante sobre cosmogonías cotidianas; de ahí daba paso a “un par de mujeres aburridas” y las Biscuits con monísimos vestidos de plástico cantaban un “conmovedor” alegato feminista.
Para completar el caótico panorama falta imaginarse una sala colmadísima de gente, incluidos grupitos punk que dialogaban a los gritos con los discípulos de Patricio Rey (fantasmático ser al que esta banda invoca constantemente). Hablando de estas huestes anglófilas, también los Redonditos se burlaron de ellos en una insólita “crisis punk de Patriclo Rey” que representó Javier Rodríguez revolcándose por el piso con movimientos espasmódicos (o espásticos) y a los empujones con el animador, mientras cantaba un rock con cierto aire a Presley.
Uno de los pocos momentos de tranquilidad fue un descansado blues en el que se les sumó Eduardo Prado en saxo; luego de esto siguió el espectáculo, incluida una extraña versión de “Cuando calienta el sol” por las Bay Biscuits.
Pero quizá lo más surrealista de todo haya sido que tocaran el mismo día que llegó el Papa a la Argentina, ¿también habrá sido parte del espectáculo?
Adriana Franco
Guit: Sky Berenson —Guit: Ricky Rajcun — Bajo: Topo D’Aloizio — Batería: Diego Rodríguez — Voz: Carlos Sorelll — Animador: Vito Nervio.