Me prometí
no repetir
quinientas veces,
mil quinientas veces,
las mismas cosas
maravillosas
que me hacen mierda,
que hacen que me pierda…
Me prometí
no reprimir jamás
mis ganas de hacer
lo que hacen los demás.
No debo rechazar
algo por ser normal
no me debo sentir
un tipo especial.