Esta superproducción se la debemos a:
La Lágrima, la reina del mercurio.
Tengo el mercurio bajo mi piel
madre mercurio ya se que hacer
se que si se acaba me voy a torcer
las células se escapan por ahí
y todas las tardes rezo porque si
Te venís arrastrando
de tu mano arrastrando
no nos va terminando
muevo el mercurio
ya sé qué hacer.