Hola fulana:
¿Cuándo dejarás de pensar en vos
y descubrirás que el mundo es más grande,
bastante más que tu habitación?
Hola fulana:
¿Quién te bajará de ese pedestal?
¿Quién te dirá que la hora es la hora
y que vos no controlás el sol?
Hola fulana:
tengo que insistir
aunque sea torpe mi forma de decirlo,
yo te deseo pero no aguanto más que estés
cayéndome tan mal.
Hola fulana:
¿Quién será el que logre despellejar
ese traje falso, esa coraza,
tu dulce y escotado disfraz?
Hola fulana:
No quiero perderme el punto final, el tiro de gracia,
porque, querida, no nos conocimos muy bien.
Hola fulana:
Tengo un anhelo,
el de existir al lado de tu ego.
Yo te deseo pero no aguanto más que estés
cayéndome tan mal.