Eran ya las doce y me levanté
mi camisa y mi sombrero y me fui al bar
Lo se, mis zapatos relucían de tanto lustrar
Viniste muy elegante hacia mi
me importaba más mi trago por eso no te vi
igual, me demostraste todo, para que me de cuenta
Y no se si volveré a ese momento en el que te encontré
Entrada la noche nos fuimos del bar
y nos iluminaban las luces de esta gran ciudad
Y me dijiste «adios, volveremos a vernos»
Hace ya unos días que no se nada de vos
yo te espero con mi tragro y el tuyo de ron
Igual a veces parece verte pero no es cierto