Brillos, plantas vengan hacia mi
yo también me dormí detrás
de la gran ciudad, vestido de gris
Y dejé mis zapatos para un arlequín
que una vez se llamó Fermín
y fue piel al fin, y fue piel al fin
Chimeneas no me engañen más,
quiero ver cielos de verdad,
sin humo ni ollín, quiero madrugar
con los grillos y las plantas y voy a gritar:
vivo aquí, yo nací después
de la gran ciudad, y hoy habrá función
para ver a un arlequín bailando sobre el sol
sobre el sol, sobre el sol…