Si con la razón vas a dar, cuida tu espalda.
Porque el delirio de los locos, que suben escalones para hundirse,
cada vez más, cada vez más.
Vos sabes no queda nada más que.
Palabras nuevas, palabras viejas.
Es problema, no tiene ningún sentido.
Con los campos desnudos y los árboles a la deriva.
Las cabezas de estos cuerpos, degollados por pedir más.
No queda más, no queda más que hablar.