Viniste en un galeón con un mar de fondo
tu mujer parió un sueño redondo
aunque el almacén es una cosa dura
fin de una aventura y el principio del ayer.
Llegaste al bordo con un solo traje
libros de oleaje y la guerra civil
no estaban tan bien vistos los que habían ganado
su nombre era franco, pero el hambre es si o si.
Ella tuvo hogar y cocina de leña
no pudo hacer un hijo en sangre morena
cortando batatas puso a dios en la balanza
y una noche de bruma, con un criollo se fue.
No hay nada mas patético que un gallego triste
no entran en la bolsa el luto y el chiste
parecías un reo por la españa ajusticiado
corazón nacional, en frente republicano.
Y desafiando el dicho y el rumor de los vecinos
el la perdono y a través de un primo
ella se entero regreso en silencio
y por no golpearla, subiste los precios.
Ella se puso gruesa como una manzana
tras el mostrador ni se le notaba
tuvieron una hija «milagros de la fe»
deseada por dos, concebida entre tres.
Una historia chica contada en los mesones
me la dijo un tipo que vive allá por flores
el la había querido con las manos llenas
y era suya la hija , a la que llamaban «la gallega».
Unas frases obvias plagiadas de algún tango
la verdadera novia y algunos golpes bajos
que puedo hacer decía para olvidarme
fui solo un padrillo de sueños de madre.
Bajaba la botella, se hacia luna llena
el tipo estaba en medio de su radionovela
lo deje a las cuatro sin saber el resto
y escribí esta historia para comprender.
que el amor es cuento
que el amor es puro cuento
que el amor es solo cuento.