Tengo guardado en mi puño cerrado
mi tesoro más sagrado.
Uh, pedazos de cristales rotos,
espejos que reflejan tus ojos.
Tratando de olvidar mis fantasías
y ese mundo que perdí,
volé hasta el lugar donde nadie sabe de mí,
donde las palomas lloran.
Ay, donde perdieron su ruta en el cielo,
antes de aprender a volar.
Caramelitos de colores,
los tuyos son los únicos que quiero,
porque sin tu caramelo me muero de sed,
de amor, pesar, dolor.
Sigo cargando el desencanto
de querer volar muy alto.
Sólo tus ojos le dan sentido
al peligro de estar vivo.
Y si me ves volver no me doy cuenta
si estoy volviendo o si nunca me fui.
Para saber de mí, andá a preguntar
por mí, dónde, donde las palomas lloran.
Donde perdieron su ruta en el cielo,
antes de aprender a volar.
Caramelitos de colores,
los tuyos son los únicos que quiero,
porque sin tu caramelo me muero de sed, de sed,
de amor, de amor, pesar, dolor.
Caramelitos de colores.
Tus ojos como dos caramelitos de colores,
de los mejores sabores.
Caramelitos de colores,
los tuyos son los únicos que quiero,
porque sin tu caramelo me muero de sed, de sed,
de amor, de amor, pesar, dolor.
Los espejos rojos que reflejan tus ojos,
tus ojos como dos caramelitos de colores,
de los mejores sabores.
Uh, de sed, de amor, pesar, dolor.
Uh, de sed, de amor, pesar, dolor.
Caramelitos de colores.
De sed, de amor, pesar, dolor.