Hace algunos días cuando te dejé
yirando, yirando
entré en un café
y es así:
me paso el día yendo por ahí.
Cuando salgo de tu casa
me voy derecho hasta el Café Madrid.
Me gusta la gente
que va a ese lugar
si voy por tu barrio
no puedo evitar ir ahí.
Se está volviendo un vicio para mí.
No me busques en mi casa
estoy seguro en el Café Madrid.
Y ahora mismo voy a ir.
Amor de mi vida
te quiero llevar
quiero que conozcas
mi segundo hogar
Es ahí.
Tengo una mesa sólo para mí
No me busques en mi casa
estoy seguro en el Café Madrid.
No me busques en mi casa
estoy seguro en el Café Madrid.
Mozo! Un tinto para mí.