El cantante Nazareno Gómez Antolini charla de su disco, del arte como terapia y del recital que darán el viernes en Groove.
“Amuletos” es el debut de Elnueveonce, la banda que en 2019 formaron el vocalista Nazareno González Antolini (ex Deny), el guitarrista Gonzalo Gallo (Siamés), el bajista Franco Barroso (Parte Planeta), y el baterista Nikko Taranto (ex Infierno 18). En los trece temas, el grupo explora géneros como el post-hardcore, el nu metal y el rock alternativo.
El disco fue co-producido con Luciano Farelli (Arde La Sangre y Parteplaneta) y masterizado por Diego Warrior. Al respecto, Antolini cuenta: “A los dos primeros singles los trabajamos entre la banda. Con este disco queríamos que hubiera otra cabeza, además de la nuestra, aportando en la producción y a la mezcla. Por supuesto que conocíamos de antemano el talento del Tano (Farelli), y no dudamos en sumarlo”.
-Con Franco conociéndolo tanto (por venir del mismo grupo), ¿cómo fue el vínculo?
-Nazareno: Con él compartimos mucho under y años, además de unirnos musicalmente en Parteplaneta. Eso hizo que todo fluyera mucho mejor, ya que sabemos nuestras manías y virtudes.
-¿Y qué sentís que aportó Farelli en la producción?
-N: Desde el lado sonoro, un montón. Porque además de coproducir el disco, él hizo la mezcla. Es ideal tener a una misma persona haciendo eso, porque el audio ya se encara de cierta forma desde el inicio.
UN ÁLBUM PROFUNDO
-El disco se basa en las seis etapas del duelo. ¿Creés que esa mirada conceptual lo “eleva”, considerando que cada vez vamos más hacia las canciones fragmentadas?
-N: No sabría decirlo para el resto de los artistas. A mí, como letrista, me da un norte muchísimo más sólido para saber de qué hablar y cómo, desde qué perspectiva, quién es el interlocutor, por ejemplo. También creo que nos generó la posibilidad de pensar el álbum de forma transversal al cómic, el arte, el videoclip y la música.
-Como decís, ese concepto se ve en la idea del cómic, que van a imprimir. ¿Cuándo creés que estará listo, y dónde se conseguirá en formato físico?
-N: Seguramente lanzaremos una edición de colección de pocas unidades, para quienes sean los “true fans”. Conceptualmente lo adoptamos en formato de tira, como si fueran episodios. Se van a ir completando a lo largo del tiempo, y luego de eso vamos a dar a luz la versión impresa.
-Metiéndonos en el leitmotiv, ¿cuál de las etapas del duelo pensás que es más complicada?
-N: Creo que depende de cada persona. Habiendo estudiado el proceso, sí entiendo que lo complejo sería si se extendiera más de seis meses. Ahí empezaría a convertirse en otra cosa. Entonces, desde mi humilde conocimiento y experiencia (ya que no soy personal de la salud mental), lo más peligroso es si te quedás estancado en una de las etapas del “medio”, como la ira y la depresión. Son las más autodestructivas. Pero por sobre todas las cosas, lo difícil es si no tenés herramientas y acompañamiento para identificarlas y trabajarlas. Por eso creo que el disco es un reflejo de la búsqueda de profundizar ciertas emociones y hablar abiertamente de la salud mental.
-Hace un tiempo dijiste que esta música es la que te hubiera gustado escuchar “a los 12 o 13 años”. ¿Por qué?
-N: Las letras van al hueso, no están tan libradas a la interpretación. Y nosotros, al ser abiertos sobre sus significados, espero que podamos acompañar a personas en una edad llena de conflictos. Eran momentos en los que aún buscábamos nuestra identidad, y comprendíamos una parte ínfima del mundo. Pero nunca me sentí en los extremos de los géneros: escuchaba toda la música que me llegara. El disco también es un reflejo de muchos estilos que nos acompañaron de jóvenes a mí y a los chicos.
-¿Creés que ahí ya te hubieras sentido identificado con esas seis etapas del duelo?
-N: ¿Quién no? Desde la pérdida de un ser querido (como mi abuela Elsa), hasta la relación conflictiva que tenía con mi viejo, y que de alguna forma me definió. De más grande, con los chicos de mi banda anterior también nos enteramos que un fan había fallecido en un accidente de trabajo. Me atravesó profundamente conocer a sus familiares, y entender que la música, de alguna forma, los acercaba a esa persona que tanto amaban. Me hizo comprender las dimensiones terapéuticas que puede tener.
HABLANDO DE LA LIBERTAD
-Nazareno, contaste que nunca tuviste tanta independencia como en este disco. ¿Por qué? ¿Le pasa lo mismo al resto?
-N: Habría que preguntarle a ellos (risas). Frank dice que siempre tuvo libertad. Por mi lado, siento que tiene que ver la etapa de tu vida, en paralelo con qué momento del desarrollo artístico. También porque, en estos años sin poder tocar, atravesé un proceso de autoconocimiento. Eso me dio mucha información sobre mí mismo, y renovó mis energías con la música. Fue como rehacer los votos nupciales con mi arte.
-El proyecto está vinculado a la numerología. ¿En qué lo sienten?
-N: El número de la banda fue como un llamado, y tiene una fuerza que va más allá de la superficialidad de las emergencias telefónicas. También porque el compromiso social ya estaba definido desde un principio. Pero mirá, apenas fundamos la banda consultamos a una persona con conocimiento de numerología, y recibimos un feedback muy alineado con nuestros valores e identidad. Además, el hijo de Nikko nació un 11/9. Es creer o reventar, pero hay algo que rodea la energía del grupo.
-Esa acción social es otro de sus pilares, y este viernes van a hacer un festival a beneficio en Groove. ¿Creés que la cultura es fundamental como herramienta de cambio a largo plazo?
-N: Ya hicimos una colecta con nuestro merchandising para una pequeña agrupación QOM. El dinero que donamos se usó para instalar un sistema de agua potable. Nuestra próxima fecha se orienta a acompañar a “Amigues por las Calles”. Es una comunidad de Capital Federal que cocina viandas vegetales y reparte jugos, mates, cafés, tés, libros y ropas. También hay talleres de ajedrez, clubes de lectura y muchas cosas para personas vulnerables. Ellos están en situación de calle. Vi a gente de la tercera edad yendo a comer a ese centro cultural en Caballito, porque no les alcanza la jubilación. El arte, el entretenimiento y la cultura son un reflejo de cómo estamos. Por eso creo que surgen referentes de distintas áreas buscando colaborar y acompañar muchísimas causas. Pero también de ahí surge la conciencia: si la gente se organiza, puede lograr cosas maravillosas.
-Franco: Si todos aportamos para ayudar al que más necesita, vamos a mejorar mucho la situación. Hoy es la gente en situación de calle, pero en otro momento puede ser un hogar o una granja de rescate animal. Si existe la oportunidad, hay que tomarla.
-N: La acción ciudadana es un ejercicio, un aprendizaje, un camino… no sólo un recital o donar por Mercado Pago. Es una manera de transitar la vida. Hay muchas cosas piolas que se pueden hacer para contribuir a que la vida de alguien sea mejor.
Elnueveonce presentará “Amuletos” el viernes 10 de junio en Groove (Av. Santa Fe 4389, Buenos Aires). El festival se completará con Sullivan, Patzo, En La Verdad y Anti.