Celeste Carballo es una cantante que hace más de un año logró convertirse en el primer ídolo femenino del rock argentino. Pero las cosas ya no son como entonces y Celeste lo sabe. Ahora está embarcada en el lanzamiento internacional de su música pero antes de fin de año tendrá su revancha con el público local cuando se edite su tercer disco y lo presente en concierto. Y esa será la oportunidad ideal para que Celeste Carballo vuelva a ocupar el sitial que tiempo atrás ganó por méritos propios.
En el ’82 Celeste Carballo flie el boom femenino del rock nacional. En 1983, la estrella celeste ya no brillaba en el firmamento rockero con el mismo esplendor de un año antes. «Mi voz renacerá», su segundo disco, no tuvo la misma respuesta que «Me vuelvo cada día más loca», el longplay debut, y las acciones de la cantante cayeron marcadamente. Sin embargo, ella pareció no preocuparse demasiado. La WEA española decidió editarle un disco recopilatorio y Celeste Carballo optó por viajar a Madrid para apoyar la edición. El viaje se extendió por varias semanas,..y la cantante tuvo la oportunidad de presentar en vivo su material con el apoyo de un grupo local. Y si bien la gira no fue un suceso masivo, Celeste logró mostrar su propuesta —adaptada al mercado español— y salir airosa del trance.
Ahora, la cantante está de vuelta en la Argentina pero por poco tiempo, ya que en los próximos días retornará a España para grabar un nuevo disco y realizar una nueva serie de presentaciones. Antes de fin de año volverá a Buenos Aires para presentar su nuevo material y tratar de recuperar el lugar preferencial que ocupó hasta no hace demasiado tiempo.
ENCASILLADO Y SEPARADO
¿Cuál es tu balance del viaje?
Fue todo impresionante. Llegué a Madrid y no entendía cómo era el movimiento de la música porque allá todo es distinto. Está todo muy encasillado y muy separado. Hay muchísimos punks, mucha música pop y heavy metal inglés y español. Yo empecé a ensayar con un grupo madrileño que se llama U. M.O. Ellos escucharon mi disco y me dijeron que les sonaba muy blando, de modo que durante un mes estuvimos arreglando nuevamente todo el material.
Yo estaba muy enloquecida por conocer España y el primer mes que estuve allá fue medio duro porque tuve que quedarme en Madrid para ensayar y no pude salir. Para peor, no conocía a nadie y extrañaba muchísimo. Además, yo estaba muy cerrada y me negaba a recibir lo nuevo. Cuando comenzó la gira Codo cambió porque fue impresionante. Yo no me imaginaba que iba a tener un recibimiento como el que tuve. En la gira estábamos Banzai, Los Angeles del Infierno y yo. Esos grupos son super heavys y yo me imaginé que can tando blues no iba a pegar. Sin embargo, lo que más pegaban eran los blues. Obviamente, yo no hago heavy metal pero al público heavy le gustó lo mío. Yo creo que les sorprendió ver a una mujer cantando rock. Allá hay muchas mujeres pero en grupos pop. Inclusive hay pocas mujeres entre el público heavy.
La gira fue organizada por la WEA, grabadora que editó mi disco en España. El álbum que salió allá es una recopilación de los dos que saqué acá. Yo viajé, justamente. para apoyar la salida del longplay. Hice muchas notas, muchas entrevistas. Todos me preguntaban lo mismo: «¿cómo puede ser que una argentina cante rock?» Lo único que ellos reciben de aquí es tango y folklore y no se imaginaban que había rock y una cosa más cosmopolita.
En septiembre volvés a España. ¿Vas a grabar allá?
Sí, voy a grabar en Madrid. Probablemente grabe algunos temas con U.M.O.. A mí me encanta mezclar gente en las grabaciones así que seguramente voy a invitar a algunos músicos argentinos. Quiero hacer una especie de unificación .
En la Argentina, tu segundo disco no tuvo la misma respuasta que el primero. Además, al poco tiempo de editarlo te fuiste del país. ¿Te parece que al público de aquí ya no le interesa lo tuyo? ¿Pensás que se olvidaron de vos?
No, no se olvidaron. Lo que pasa es que en el segundo disco yo me puse muy a cantar otras cosas y. entonces no hubo respuesta del lado de la productora. El disco no tuvo difusión y como la gente ve las cosas muy por arriba se imaginan que no voy a hacer más nada. ¡Están todos locos! Estoy en mi época más productiva. Aparte me abrió mucho la cabeza todo lo que escuché allá. Tengo mil cosas para hacer ..
¿No te extrañó que la producción no apoyara al disco teniendo en cuenta que el primer longplay había sido un éxito?
Humm … sí, sí.
¿Te parece que no confiaban en el material?
Exactamente. La producción no confió en el disco.
¿Y se puede revertir la situación para cuando grabes el tercero?
Más bien . . . Sí, más bien.
LA SUBIDA O LA BAJADA
¿Cómo es el material del nuevo disco?
Mirá, estoy preparando mucho rockanroll y blues. Finalmente, eso es lo que siempre me tiró más.
¿Va a ser más pesado?
No sé si va a ser más pesado. En realidad, no te puedo decir cómo va a ser hasta que no lo tenga hecho porque yo tengo un pequeño defecto que es el de ir preparando las cosas en el estudio. Ahora la cosa va a ser un poco distinta porque voy a tener un productor y entonces la cosa cambia, ¿no? Mis dos primeros discos los hice sola, con la colaboración de los músicos que tocaron. No obstante, te quiero decir algo: me hago en la parte ‘productora. No me importa que no les haya gustado mi segundo disco. Para mí hay cosas buenísimas. Pienso que lo que le faltó a ese disco fuí yo misma. Mi historia no estuvo en ese disco como estuvo en el primero, en que cada tema era un pedazo mío. En el segundo disco me puse medio rebelde y no quise contar mi historia. Me puse a hablar de otras cosas. Y quizás la gente esperaba otra cuestión. También me puse un poco rebelde en el sentido de decir «bueno, qué esperan de mí: ¿esto? Bueno, yo no estoy para hacer lo que esperan de mí; yo estoy para hacer lo que siento necesidad de hacer». Si esto sigue así, vamos a estar en un desencuentro permanente. O en un encuentro permanente, quién sabe. No me interesan la subida o la bajada. A mí me importa únicamente el camino en sí.
Vos fuiste lanzada en España dentro del mercado del heavy metal. ¿Te costó adaptar tu música para que pudiera ser incluída dentro de ese mercado?
Sí, en cierto sentido sí. Pero el tema que se pasaba por la radio era «Coronel Pringles». Yo no me volqué descaradamente al heavy rock. Lo único que hice fue tocar mis temas con arreglos un poco más duros. Además, la banda que me acompañó allá era muy distinta a la que tocaba conmigo acá porque tenía dos guitarras, bajo y batería. Al tocar con dos guitarras —y cuatro Marshalls atrás— el sonido cambia ¿no?
Ahora que ya conocés el mercado, ¿qué posibilidades de trascendencia le ves a tu música en España?
Le veo buenas posibilidades. No hay mujeres cantando rock y blues y eso les impacta. Además noté a la gente muy abierta para recibirme. Mi idea era quedarme para meterme bien en la cosa y empaparme de todo lo que pasaba, pero extrañaba mucho y decidí volver. Ahora me voy a grabar y después voy a volver para presentar mi nuevo disco. Eso será más o menos para noviembre o diciembre. Cuando vuelva voy a armar una nueva banda. Siempre hay que seguir adelante haciendo cosas nuevas.
Osvaldo Marzullo
