Tiene su casa al lado del río
un perro viejo de amigo
y mucha soledad
sus esperanzas
son olvidos
y mira todo sin poder desear
espera tus sobras en su mesa
o sólo un sueño que soñar
es un hombre nada más
mira todo sin poder desear
no le quedo nada luego de la tormenta
es costumbre de pobre saber olvidar
las lagrimas ya no le brotan más
es una noticia más en esta vorágine
el viejo Miguel busca su camino
el camino que nunca pudo encontrar
es un hombre nada más
el río a crecido una vez más
él camina las leguas
buscando el sol
donde calentar su alma
con un poco de ron
pero nadie lo espera
porque nadie hay
y no cree en el destino
muchas veces le falló
no muy lejos de allí
en la ciudad
detrás de sus ventanales
mirando la lluvia caer
el no sufre de frío no
ni tampoco el olvido le hace mal
son dos hombres nada más
tan distintos pero iguales
viejo Miguel… buscando… buscando