Al tano Bertollucci se la compraban
a tres mangos el mogra y era un ponche
los gominas farristas se la mandaban
para entrar bien encendidos en el valet
Desde el bar de Rosendo Maipú y Corrientes
a Recoleta se echaba un cuarto de hora
las parejas subían alegremente
y el mateo arrancaba sin más demora
Y ya en marcha empezaba la menesunda
y como ellos eran tan caballeros
la primer narigada onda y profunda
se servían las damas siempre primero
Gritandole a la auriga siga cochero
gritandole a la auriga siga cochero
Llegaban las farfalas y los gominas
bajaban encendidos desde el palé
dandole a Bertollucci buena propina
y además le obsequiaban con un tuche
Llegaban las farfalas y los gominas
bajaban encendidos desde el palé
dandole a Bertollucci buena propina
y además le obsequiaban con un tuche
y además le obsequiaban con un tuche
Al tano Bertollucci que descanse en paz