Nacidos del rayo en la tormenta
y del vientre del volcán,
no vinimos a esta bendita tierra
tan solo a predicar,
somos el fuego ardiendo en las venas
la sangre combativa,
somos lo que el mundo hizo que fuéramos
la furia de la vida.
porque hay verdades de mentira
y hay mentiras de verdad,
que transforman la pena y la herida
en furia, furia, furia
por los pobres de la tierra,
por los que no tienen voz,
por las malditas guerras,
y por sus muertos,
por el sucio poder de unos pocos
con el mundo a sus pies,
y el cruel plan de exterminio en su corazón,
furia, furia.
hace tiempo que ya siento
el filo de un grito interior,
es la locura de los cuerdos
furia, furia.