Ya se llevó el viento la tormenta y ella ríe por cualquier cosa otra vez.
Me abraza, le late el pecho, pasará un poco de tiempo y se pondrá del todo bien.
Y es que nadie le enseñó a decir te amo, y es que nadie le enseñó a pedir perdon,
y es que todas las tormentas tienen algo que ilumina y es mejor, mejor, mejor.
Vamos a dar una vuelta, a reír sin darnos cuenta, a tener ganas de más.
Ella es así -no hay dudas-, tiene que dejarme a oscuras para que la pueda iluminar. Y es que nadie le enseñó cómo decirlo, y es que nadie le enseñó cómo mentir,
y es que todas las tormentas tienen algo que ilumina y es mejor, mejor, mejor.
Es mejor que te duermas de una vez, la mañana va quemando las cenizas;
es mejor que te duermas de una vez, todo tiempo que pasó se fue en la risa.
Y hoy llueve dentro del sol.