El viejo tejano se va con la bota llena,
tomo del camino del nunca mas volver.
y se va y no vuelve mas,
pero se va y no vuelve mas.
El sol abraza con rayos de primavera,
y ya los cuerpos comienzan a arder.
Mas arde el mío si llevo en las venas,
aquel secreto de su extraño ser.
Sabe que un día, frio estará,
y a nuestros muertos resucitara,
y con nuestros amigos el brindara…