Es el amor un sueño,
o algún metal fundido,
que te da vuelta la piel.
En un silencio fértil,
como la tierra oscura,
nunca estuvimos tan cerca.
Le pertenece a la vida,
esta pena sin manchas,
tan parecida a una brisa.
No apareces como un ave
y a las mil coloridas,
que me bendice la sombra.
Se derriten los escudos en la cama,
junto a los cuchillos.
Se derriten los cuchillos en la cama,
junto a los escudos.
Se derriten los escudos en la cama.
Ah ah ah ah ah ah ah ahhhh…
Se me da vuelta la piel.
Ah ah ah ah ah ah ah ahhhh…
Se me da vuelta la piel.