El show que lleva el nombre de “Singularidad” se concretará el miércoles 6 de noviembre en Café Berlín.
Sol Quintas, La Dra del Rock, está transitando un auspicioso 2024; entre las guardias y atención a sus pacientes, se hace tiempo para ensayar y componer. Recientemente subió a todas las plataformas el primer EP en vivo, realizado a fines del año pasado en La Trastienda.
Un año de mucho trabajo en la búsqueda de nuevos sonidos, que la gente podrá disfrutar y descubrir durante su regreso a Café Berlín el 6 de noviembre.
¿En qué momento se encuentra Sol Quintas?
Es un momento musicalmente interesante y muy rico. Si tengo ganas de hacer una canción rock/pop, la hago. Las últimas composiciones fueron un poco más de la línea de la que yo salgo, que es un rock más pesado. La verdad es que, si bien hago rock, no me encasilo en ningún estilo.
¿Qué te motivó a volver a Café Berlín?
Café Berlín es un lugar emblemático, donde toqué y me sentí muy cómoda. Tiene un sonido increíble, y la opción de usar el piano con el que cuenta también. Te permite otras cosas y el escenario es grande. Además, tocan muchas personas de renombre y para mí es un honor presentarme nuevamente.
¿Cómo planificás la lista de temas, puesta en escena y dinámica del show?
Presentaré dos canciones nuevas y eso hace que tenga que pensar en la dinámica. Quizás no es la misma que el último show o los anteriores.
Tengo mis raíces freudianas, por lo que suelo hacer una intro instrumental y pegar una canción. Probablemente arranque con uno de los últimos temas, que tienen bastante fuerza, y sumar un esquema acústico con un coro sorpresa.
¿Qué nos podés adelantar de «Singularidad?
La canción tiene mucho que ver con la intro, siempre armo una nueva para cada show, así que tienen que venir a Café Berlín para conocerla.
¿Te gusta respetar el audio de estudio o improvisar arriba del escenario?
Creo que un artista siempre trata de conservar el audio de estudio, pero en vivo surgen otras cuestiones. Algunas que están previstas y otras que se libran al azar. Como guitarrista, muchas veces pasan cosas, sobre todo dentro del formato del solo. Pienso que es como una pequeña historia dentro de la canción.
¿Por qué nadie debería perdérselo?
Me parece que es una propuesta no tan vista y el show pasa por diferentes momentos. Como un viaje por los 70, 80, 90, e inclusive tengo algunas canciones con ingredientes más actuales.
¿Cómo viviste la experiencia de La Trastienda?
Poder hacer música y compartirla con el público fue una experiencia única. No todo el mundo puede dársela, así que lo súper disfruté junto a mis compañeros. Recientemente lanzamos un EP en vivo desde La Trastienda, que puede disfrutarse a través de las plataformas.
¿Qué es lo que más disfrutás de la música y no encontrás como neuróloga?
De la música se disfruta todo, y como doctora también. Me gusta poder encontrar espacios donde pueda dar lo mejor de mí y, a su vez, me lleve lo mejor en todos los ámbitos. Ambas profesiones están vinculadas porque muchas de las cosas que puedo vivir o experimentar en el ámbito médico son disparadores de canciones. Si bien la música tiene otro vuelo, el buen médico tiene que tener mucho de arte en relación al sentido común. De esa manera, una se nutre de la otra.
¿Cuáles son tus influencias actuales? ¿Hubo algún artista o banda de los últimos tiempos que te haya llamada la atención?
Mis influencias son las de siempre, escucho mucha música de todas las décadas (a partir del 70) y creo que eso se nota a la hora de la composición.
Respecto a lo actual, me gustan muchas cosas y se nota que hay un background que los marca. Por ejemplo, Seven Kayne viene del ambiente del trap, pero tiene interesantes rif. Si bien María Becerra no hace rock, considero que es una artista increíble.