Fede Cabral presenta Irrompible, su nuevo disco solista, que marca un regreso al rock después de una década de explorar sonidos acústicos, electrónicos y con influencias folclóricas.
Con su Telecaster Avri soñada en mano, Fede grabó lo que él mismo considera su primer «disco de rock» en solitario, definiendo un nuevo rumbo para su carrera. Sin embargo, Irrompible no es un trabajo explosivo, sino un álbum que parece avanzar a paso firme, despojándose del pop y sumergiéndose en un sonido más profundo y reflexivo.
Este es el quinto álbum de Fede Cabral desde que comenzó su carrera solista en 2013 con Sí, tras la disolución de Sancamaleon, la banda que lideró durante la primera década de los 2000. Con Irrompible, Fede busca crear un disco «fabricado para durar», según la descripción que aparece en la contratapa de la edición en vinilo. «El detalle es lo que nos hace humanos en la era de la inteligencia artificial», escribió en redes sociales antes del lanzamiento. En una conversación en un bar, Fede reflexiona sobre la velocidad con la que se consume la música actualmente y la pérdida de lo artesanal en el proceso. “El impacto es lo que nos vendieron las redes sociales. Lo rápido”, comenta. En contraposición, él valora la dedicación y el trabajo que se toma su tiempo: “¿Por qué las cosas duraban más antes? Las cosas físicas, las sillas. Ahora todo es descartable para que consumas más”.
Esta filosofía de tomarse el tiempo necesario se refleja en las letras de Irrompible. En la canción “Fuego lento”, Fede canta sobre hacer las cosas a su manera, al ritmo que él decide, sin dejarse llevar por las tendencias. “Inventé mi modo/ quiero que me lleve hasta lo más hondo del alma”, expresa.
Para Fede, el contexto actual es “muy cortoplacista”, con la música orientada a generar impacto rápido y efímero. Pero él quiere ir más allá de lo inmediato, buscando que su trabajo perdure en el tiempo, que pueda ser apreciado con el paso de los años. “Eso es Irrompible: el proceso de sentarse, hacer las cosas a conciencia. Ese trabajo es lo que yo quería reivindicar en este disco. Algo que excede a las canciones en sí”, explica, en una entrevista con el periodista Federico Anzardi.
A través de pequeños videos animados que compartió en redes, Fede muestra su aprecio por los trabajos manuales, como la carpintería o la escultura, y el valor de los objetos que perduran a lo largo del tiempo. “Un lenguaje del pasado floreciendo entre mis manos”, dice, destacando la importancia de lo que permanece.
Musicalmente, Irrompible se despliega con un sonido robusto, donde la guitarra de Fede traza nuevos caminos acompañada por la batería de Pablo Potenzoni (ex Todos Tus Muertos) y el bajo de Agustín Alonso (ex Érica García). Canciones como “Papel dorado”, “Fuego lento” y “Un secreto” presentan un estilo marcado por la fuerza del trío, mientras que en otras como “Irrompible”, “Un puñal” y “Las luces” se abre a nuevos horizontes. “Oro puro” evoca al Fede más clásico, ahora con una banda que le aporta una nueva densidad.
El retorno de Fede al rock no busca revivir los años de Sancamaleon, aunque reconoce que la banda quedó marcada por el contexto de crisis de principios de los 2000, formando parte del sonido rabioso de la época post-De la Rúa, junto a temas como “Se viene” de Bersuit Vergarabat y “Los métodos piqueteros” de Las Manos de Filippi. Fede recuerda cómo Sancamaleon enfrentó polémicas, como cuando el videoclip de “El camino” –en el que una pareja de niños robaba un banco para compartir el botín con su comunidad– generó controversia y lo llevó a discutir en el programa de Daniel Hadad. “Yo me acuerdo que le decía ‘¿Pero a vos qué te molesta? ¿Que repartan el dinero?’”, rememora Fede sobre aquel intercambio.
Irrompible también es una reafirmación de su enfoque detallista en el trabajo de audio. Desde su primer álbum, Fede ha experimentado con sonidos, como grabar el ruido de un lavarropas, y en Casa de piedra (2020) grabó su voz y un charangón en la profundidad de las sierras de Córdoba, buscando capturar la acústica única del lugar. Ahora, con Irrompible, Fede Cabral invita a los oyentes a sumergirse en un proceso artístico consciente y a apreciar la durabilidad de lo hecho con dedicación.