El cuarteto porteño Esencia Vudú celebra la salida de su tercer álbum de estudio con un Tour Imaginario que le permite recorrer diferentes puntos de la provincia y alrededores.
Desde el 2009 que Esencia Vudú forja su propio estilo, con melodías eternas y una fuerza que mueve las emociones de las personas. Su trayectoria musical incluye los álbumes Umbral (2013) y Reflejos (2016). También edita los sencillos: «Brújula» (2019) y «Despojarse de la Piel» (2020). Tras adelantar los cortes «Tal vez Nada» y «Ella», llega su tercer disco El Refugio Imaginario (2022), donde toman las riendas de la producción artística, expanden su abanico sonoro y muestran una notable evolución lírica. La obra completa incluye trece canciones pensadas como un viaje que atraviesa diversas emociones y cuyo orden resulta fundamental para que fluyan de principio a fin. El mismo se encuentra disponible en plataformas digitales y podrá ser degustado el sábado 1 de julio en ATP Espacio Cultural (San Martín) como parte de su gira de presentaciones.
El viaje musical de Esencia Vudú
¿De qué manera nació el disco que están presentando y cuál fue el criterio al momento de seleccionar las canciones que lo integran?
Con el tiempo muerto de la pandemia, decidimos aprovechar a pre-producir el material que teníamos con la idea de renovar un poco nuestro sonido. Al principio no fue tarea fácil, ya que cada uno debía grabar su parte y enviarla para ensamblar. En base a eso, hacer intercambios y tomar decisiones a la distancia. Así y todo, logramos armar las maquetas.
En la medida de que se flexibilizaron las restricciones, pudimos volver a ensayar y terminar de darle forma al disco.
El criterio de selección de las canciones no difirió de los anteriores, ya que siempre lo pensamos como un viaje atravesando diversas emociones. En ese recorrido es fundamental el orden para que fluya de principio a fin.
Lo que sí incorporamos, fue conectores que le dieran sentido como obra completa. Esto no quiere decir que sea algo conceptual, revalorizamos la idea del disco por sobre la tendencia actual de lanzar temas, ya que estos deben tener un peso que justifique su publicación por sí solos. En cambio, el álbum permite que convivan temas de esas características con otras que quizás no sean hits, pero que merecen existir.
¿Cuándo, dónde y con quiénes lo grabaron?
Lo realizamos durante 2021 y 2022 en Deja Vu Estudios. La grabación y mezcla estuvo a cargo de Aníbal Buonarcorso, con quien ya habíamos trabajado para los singles «Brújula» y «Despojarse de la piel».
¿Cuáles fueron los mayores desafíos dentro del estudio?
Los mayores desafíos implicaban salir de nuestra zona de confort: tratar de crear arreglos diferentes, explorar sonidos de guitarras, incorporar sintetizadores, usar otros instrumentos y, sobre todo, ejecutar samples para crear nuevos ambientes.
Hablemos sobre la intención lírica y el concepto que une estas canciones.
Nunca habíamos prestado tanta atención a las letras como en «El Refugio Imaginario». Pusimos especial dedicación en eso. Si bien hay gente que se identifica con nuestras letras, para nosotros siempre habían estado en un plano secundario en relación a la música. Esta vez quisimos que estuvieran a la par y fuimos realmente rigurosos.
La temática de las canciones es fruto de nuestras experiencias en los últimos años, como el de alguna pérdida o la paternidad. Y, sin dudas, también la pandemia ha tenido su influencia como generadora de un contexto que provocó fuertes emociones. Pero no todo es oscuridad, tanto lírica como sonoramente, creemos que el álbum tiene un buen equilibrio. De hecho, la palabra que más se repite en el disco es «Sol» como metáfora de diferentes cosas. En definitiva, también hay lugar para la esperanza.
¿Qué condimentos sonoros les gustaría destacar?
Principalmente, el uso de samples, programaciones, sintetizadores y nuevos efectos que aportaron diferentes colores y nuevas posibilidades a las canciones.
Si tuviesen que elegir un lugar o momento especial para escuchar el disco ¿cuál sería y por qué?
El disco, ya desde su título, apela a la imaginación. Lo que buscamos justamente es encontrar «ese lugar» donde uno puede abstraerse de los problemas del mundo y ser uno mismo, con felicidad y sin limitaciones. Proponemos dejar volar la imaginación.
Lo correcto sería decir que aquel ambiente/situación que sea propicia para permitirse escuchar el disco de principio a fin y dejarse llevar, sería el ideal.
¿De qué manera acompaña el videoclip del corte «Ella» y quiénes ayudaron a plasmarlo?
Hace tiempo que teníamos ganas de hacer un videoclip sólo de la banda tocando, donde todo el impacto visual pasara por la estética y el ritmo, y no por una historia con actores. Este es el tipo de propuesta audiovisual que más nos gusta y muestra esencialmente lo que somos: una banda. Lo grabamos con un grupo de personas con quienes trabajamos en «Tiempo Atrás» y que captaron muy bien lo que buscábamos.
¿Como describirían el vivo del proyecto?
Actualmente los shows están compuestos por un buen mix de canciones del nuevo álbum y los anteriores. Buscamos que fluyan de principio a fin, pasando por distintos climas. Estamos comprobando que muchos de los últimos temas funcionan bien en vivo y seguramente se conviertan en los nuevos clásicos de nuestros conciertos.
Definan su presente y la planificación para los próximos meses.
Estamos concentrados en llevar «El Refugio Imaginario» a todos lados. Los próximos shows serán el sábado 1 de julio en ATP Espacio Cultural (San Martín), y el viernes 14 de julio en La Barra (Quilmes).