Durante el año pasado crecieron en público en manos del álbum «Danza de Antalgia», el cual los llevó a tocar con músicos reconocidos y a participar en festivales nacionales.
«Fue el disco más íntimo que grabamos, y desde que lo sacamos siempre atrajo cosas buenas. Es nuestro aliado, nuestro amuleto», describe Sebastián Andersen (voz del conjunto) y agrega: «Sentimos que venimos trabajando con ánimo y ganas, y cada paso fue importante y vamos aprendiendo en cada oportunidad».
Quién esté en la búsqueda de melodías pegadizas, letras fáciles de recordar, fusiones de estilos como el celta, el funk, la psicodelia y latinos; y música que invite al baile y la alegría, El Plan de la Mariposa es una buena opción.
Como todo conjunto con numerosos integrantes, donde la unión, una pacífica convivencia y la hermandad son primordiales, este octeto de Necochea cuenta con todas esas virtudes al pie de la letra, justamente con cinco integrantes de misma descendencia.
«Ser cinco hermanos es una gran ventaja, sobre todo al principio –señala el frontman-. Hoy la familia es más grande y se sumaron, ya hace años, los integrantes que completan El Plan. Está bueno, es un clima familiar y de trabajo. Hay confianza y actitud para ir al frente con lo que estemos buscando. Es una experiencia vital que disfrutamos mucho y un desafío que nos mueve la sangre».
Desde hace varios años, El Plan de la Mariposa emigró de su Necochea natal para radicarse en Buenos Aires, a la que Sebastián define como «una máquina de humo gigante donde se vibra una energía muy intensa» y apunta: «Está buenísimo estar en ella para salir y volver a venir. De esa forma es que nosotros la vamos surfeando con idas y vueltas. Para la banda está bueno porque hay mucha gente y muchas movidas y posibilidades culturales múltiples para nutrirse y desde acá es más posible salir a otros lados».
Con «Danza de Antalgia» (2015) llegó la posibilidad de tocar junto a Manu Chao, Ciro y los Persas, La Vela Puerca, No Te Va Gustar y de formar parte de la reciente edición del Cosquín Rock. «Estamos muy felices de haber participado –remarca Sebastián-. Fue muy importante y motivador para arrancar el año. Pudimos ver muchas bandas y conocer mucha gente. Y estar en Córdoba, que es uno de los lugares más lindos del país. Tocamos un show corto y con temas bien arriba para dejar lo mejor en el tiempo que teníamos. Volvimos de allá con la energía renovada y ganas de seguir en este viaje que nos lleva por lugares nuevos e inesperados. Hay muchas ciudades del país a las que nunca fuimos a tocar. La idea este año es poder llegar. Estamos muy motivados con salir a tocar. Vamos a sacar algunos vídeos, que es una parte del viaje que nos divierte mucho. También estamos trabajando en un nuevo disco que veremos cómo va madurando».