No trates de ocultar,
no vas para ninguna parte.
Buscabas la verdad,
siguiendo a los ciegos del mal.
Confiaste en su bastón
y el tuyo lo olvidaste.
Tu sombra se escapó,
no tuvo tiempo para hablarte.
Y ya no la encontrás
y estar tan solo es desangrarse.
Un reflejo sólo es una imitación,
la belleza no se mezcla en él.
Entre todo este diluvio mi canción
ya no puede esconderse.
El calor infernal
de las multitudes,
incuba un ser extraño
en todo aquel que acude.
Un reflejo sólo es una imitación,
la belleza no se mezcla en él.
Entre todo este diluvio mi canción
ya no puede esconderse,
ya no puede esconderse,
ya no puede esconderse.