Se hace para atrás y desde la mitad
volverá a arrancar, sin dudarlo.
Le duele la sien de tanto estar al sol,
quemándose arderá.
El sendero fué lo que lo hizo sorprender
y sintió detras del pecho
un calor feroz, la explosión no se esperó:
estallaba en mil pedazos.
Desde la mitad, vuelve a crecer otra vez.
Y pensó en nadar bajo su piel, una vez.
Y si el fuego ya baila con él, está bien.