Trajiste fantasmas
a esta habitación.
Casi te doy
la razón,
qué mala costumbre!
Pero ahuyenté a los fantasmas
y a vos también.
Se terminó el hechizo
y voy a hacer
las cosas al revés.
Aunque te cuente como es,
no lo querrías entender.
Enredabas la noche
y el día a diario,
embalsamada
como un aniversario.
Qué mala costumbre!
Con tus manías resulta evidente
que nos inocente.
Eso es mentirse
para no entender,
nadie quiere verte.
Aunque te cuente como es,
no lo querrías entender.