Aparecés y desaparecés,
te hiciste invisible,
como las sombras cuando no hay luz
y los espíritus que van sin cruz.
No se si todo vuelve,
entonces te fui a buscar
y perdí otra vez el juicio
contra la ley de gravedad.
Sentí que se movía la tierra debajo de mis pies
y que las cuentas pendientes se pagan alguna vez
Ni siquiera sos fuego amigo,
si ni dormís hoy conmigo.
Dejaste llamas en mis manos,
imposible no quemar.
Tu legado es este infierno
más prendido que los muertos
que choco cuando me despierto
al reflejarme en el incendio.
Sentí que se movía la tierra debajo de mis pies
y que las cuentas pendientes se pagan alguna vez