Estuve con las tropas rusas peleando en Chechenia
y en Somalía tuve que pasar un hambre atroz,
pero un hombre como yo siempre se las ingenia
y hasta en Sarajevo se puede estar mejor que con vos.
Me refugié con Salman Rushdie en miles de cuevas
y me persiguió la CIA, la DEA y hasta el CIPEC.
La única que me alcanzó fuiste vos, tengo pruebas,
guardo fotos tuyas conmigo esté donde esté.
No sé, no sé, no sé,
no sé hasta dónde llegaré,
no sé hasta dónde llegaré por vos.
Vendí cocaína en una favela de Río,
después me compró el pase el Cartel de Medellín,
pero ni siquiera en Chiapas estuve tranquilo:
me escapé en globo y vos me seguiste en un zepelín.
Si fuera posible te mando en cohete hacia Marte,
pero para el taxi espacial sólo venden boletos de a dos.
Y sé que no gano nada con asesinarte
porque si te mato seguro que vas a llevarme con vos.
No sé, no sé…