Como toda forma de amor duradero
yo te hago un asado
un nudo en el tiempo que va de costado
borrando el problema de vivir dudando
te convido el vino de la tarde noche
olvidando el cielo que nos deja siempre
mirándolo tanto que se cansa el cuerpo
de estar observando
yo no tengo nada más grande que esto
un banquete simple, la noche enjaulada
el fuego que enseña que el calor te deja
la cara tirante y el alma sincera
total los epílogos
siempre son los mismos
lo importante insiste
y el resto se quema.