Con el hit «Química» los chicos de Banda de Turistas muestran su impronta psicodélica ante el rock y el pop, afirmando que la música va más allá de los géneros.
En esta entrevista nos cuentan los detalles del último material, su crecimiento dentro del circuito under y la fecha más importante del año en La Trastienda.
¿Cuál creen que fue el puntapié para que un tema como «Química» se convirtiera en hit llegando recién al cuarto disco de la banda?
Luis: Es el primer tema bailable que tenemos, y eso sin haberlo pensado mucho. Obviamente, queríamos una canción de ese estilo, pero no sabíamos que iba a tener tanta masividad. Para nosotros es algo nuevo y fresco que identifica a la gente.
Tomás: Por otro lado, también tiene que ver con una cierta síntesis que logramos en los sonidos y cosas que veníamos experimentando. Si hay que ser realistas tuvimos un resultado mucho mejor que en discos anteriores, con un sonido que se adapta un poco más a la FM. Queríamos que el tema suene bien y nos parecía que el estribillo podía ser pegadizo.
Luis: Insisto en que el tema es distinto porque es bailable, y lo notás en el vivo, que es lo más importante. Una banda de rock o pop hace música para después llevarla al show, y hay una gran diferencia entre lo que te produce «Química» del resto de los temas. Te lleva a otro pulso, a otro beat.
Mencionas al rock y al pop. ¿Cómo definirías a Banda de Turistas dentro de esos géneros?
Luis: Tenemos guiños de ambos porque es la música que escuchamos. Pero a su vez, creemos que esa batalla que algunos libran entre los géneros es inexistente. Para mí una linda canción va más allá de las clasificaciones, y nosotros hacemos esta música que roza el pop porque es un componente muy amigable. Somos músicos y hacemos una obra para que nos identifique, tanto a nosotros como al público.
Tomás: Nosotros no sólo escuchamos rock, pop o baladas, nos gusta todo. Un día podemos aparecer con temas de Riff o Black Sabbath, y otro día estamos escuchando Michael Jackson.
Luis: Desde que la banda empezó teníamos estos gustos y creemos que afortunadamente el mundo tiene cada vez más presente esa fusión de estilos.
Sienten que los límites hoy por hoy no están tan marcados.
Tomás: Tal cual, y tratamos de plasmar esa identidad en nuestro disco. En ningún momento vas a encontrar que los temas son parecidos entre sí, por eso es tan ecléctico.
Luis: «Química» por ejemplo, es un tema muy distinto y no hay otro así en el disco. A veces pasa que los artistas repiten su propia fórmula, pero a nosotros no nos interesa eso. Incluso hay temas que no tienen nada que ver con la idea pop de la canción, pero que adoramos tocar en vivo. La realidad es que no somos músicos de raza, sino que aprendimos escuchando discos y bajando temas.
A la hora del vivo ¿con qué público nos encontramos?
Tomás: Es un público que fue cambiando. Al principio, éramos una banda más de culto o que estaba más metida en el mundo under. Venía mucha gente de otros grupos porque estaban interesados en la propuesta de pibes jóvenes como nosotros que hacían música psicodélica.
Luis: Nos convertimos en algo más heterogéneo y sentimos que el público ahora puede ser cualquiera. No es un show específicamente de rock o de heavy metal, de repente hay gente muy variada, y nos gusta esa diversidad porque es producto de hacer un grupo basado en las canciones.
Tomás: Tiene que ver con el concepto del disco y de la gente que disfruta la música más allá del género. Nosotros no nos identificamos con uno en particular, y a esta altura en la que internet te pone al alcance tantas cosas, el tema de los géneros importa sólo a los tipos que están interesados en vender. Podés disfrutar de todo, siempre y cuando te estén brindando un show de calidad. Quizás es algo que nosotros notamos más en el público mexicano, porque son muy abiertos. En el Vive Latino conviven desde grupos punk hasta ska, pop y artistas electrónicos. Está muy bueno y es lindo que pase eso. A veces siento que en Argentina nos cuesta un poco más esa apertura.
«Mágico corazón radiofónico» fue mezclado en Los Ángeles y contó con la participación de mucha gente importante ¿Cuál fue la apuesta técnica para superarlo con «Lo que más querés»?
Luis: La grabación del primer disco se dio de la manera más austera porque lo hicimos nosotros mismos. Lo que pasó en Los Ángeles fue que le mandamos un mail a Mario Caldato, que es un productor que trabajó con bandas como Beastie Boys, y nos respondió milagrosamente diciéndonos que le gustaba nuestro material. No viajamos, sino que fue todo por mail y cuando salió ese disco tuvo buena repercusión. En el caso de «Lo que más querés» la apuesta fue volver un poco a lo que hicimos al principio, en el sentido que pudimos construir nuestra propio estudio. Patricio (baterista) y Guido (tecladista) son muy buenos armando y reciclando cosas, así que con su ayuda volvimos a la comodidad de grabar en nuestra sala. Nos tomamos más tiempo y cuando hubo que mezclarlo se alquilaron unos días en un estudio en General Rodríguez. Tuta Torres participó en la producción de ocho temas y Juanchi Baleirón, en dos.
Tomás: No es que tengamos una gran experiencia grabando discos, pero nos dimos cuenta de que lo que más nos funcionaba era tener ese espacio propio donde podíamos experimentar con los sonidos. Y si te soy sincero, nos volvimos medio quisquillosos porque no encontramos un técnico que logre lo que nosotros buscamos. Si querés grabar algo que está en tu cabeza y nadie lo puede bajar, lo tenés que hacer vos.
Luis: Cuando decimos que no encontramos a la persona indicada, es porque nos entendemos bien entre nosotros y tenemos claro lo que queremos. A veces es difícil incorporar a alguien que capte el concepto. Por eso hicimos dos temas con Juanchi y el resto con Tuta, que es nuestro amigo y produjo el primer material de Banda de Turistas. Al final, hicimos el disco que queríamos hacer con la impronta de seguir mostrando la esencia de la banda.
¿Este disco les permitió hoy por hoy vivir de la música?
Luis: Estamos dando ese paso, pero podríamos decir que sí, porque tocamos mucho. Viajamos por el interior e hicimos shows en países como México, Colombia, Perú y Chile. En Argentina las bandas que pueden vivir de esto son pocas, y nosotros por ser jóvenes, estamos bendecidos.
¿Esa apertura al exterior se dio desde el comienzo?
Luis: Sí, desde el primer disco que hacemos giras, pero en este último la cuestión se tornó más importante.
Tomás: Fuimos aprendiendo bastante y tuvimos la suerte de que nos llamaron para participar de un Vive Latino cuando lanzamos «Mágico corazón radiofónico». Eso nos abrió la cabeza, porque ya no pensábamos sólo en lo que teníamos acá.
Luis: Haber logrado por lo menos una aceptación en esos lugares es muy esperanzador. Cuando caímos en la cuenta de que no habían barreras fue cuando nos mandaron los pasajes para ir a tocar. En ese momento sonaba «Todo mío el otoño» en la radio nacional de allá, donde la audiencia es enorme y les gustaba. Subimos al escenario y cuando tocamos había gente cantando los temas y no lo podíamos creer. De todas maneras todavía nos pasa de ir a lugares donde aún no hemos tocado y hay muy poca gente, pero en esto aprendés a estar preparado para todo.
Como decís es esperanzador, sobre todo para bandas que recién empiezan y quizás tienen esa incertidumbre de saber si podrán crecer dentro del under.
Luis: Se trata de trazar un camino y como banda superarse disco a disco. Eso se logra con una constancia de trabajo y hacer las cosas necesarias para lograr una diferencia entre ayer y hoy.
Tomás: Es como la medicina, no es que podés dejar de estudiar y decir que estás consagrado. Eso no existe en los artistas, sino que ocurre todo lo contrario. Es cada vez más exigente, porque tenés que estar a la altura de lo que se espera de vos.
Y en su caso corre la frescura y la mutación que buscan lograr en cada disco.
Luis: Sí, eso es lo malo de ser degenerado.
Tomás: Nos gusta la provocación en la música.
¿Cuál es la idea para el próximo 11 de julio en La Trastienda?
Tomás: Un poco es mostrar el show que tanto venimos puliendo en las giras, y con el plus de que va a tener varios temas del disco nuevo que nunca fueron escuchados. Y al mismo tiempo, queremos recorrer nuestro repertorio, que no es tan extenso, pero donde tenemos nuestros temas favoritos. Probablemente, tengamos algún invitado y van a poder disfrutar de cosas preparadas para este show que después no se repetirán más. A veces pasa que no te da la estructura para poder hacer el show que tenés pensado, pero en esta ocasión sí, porque lo hacemos una o dos veces al año y ponemos todas las fichas. Por eso es importante que la gente sepa cómo va a ser el show.
Eligieron como banda invitada a Indios, que tiene un estilo parecido al de ustedes.
Luis: Sí, se dio así y está bien que pase porque somos bandas que estamos en el mismo camino.
Tomás: Tienen una propuesta que está a la altura de Banda de Turistas y está bueno darles el espacio para que puedan mostrar sus canciones. También va a estar presente un Dj amigo, y queremos que sea un evento donde la pases bien desde el momento que entraste a La Trastienda hasta que te fuiste.