Buen título para un álbum, y tal vez el que más precisamente define su contenido. Baglietto es un músico rosarino que trascendió las fronteras de su provincia hasta conseguir interesar a una multinacional (que siempre se mostró renuente a la música argentina), que editó su primer long play.
“Tiempos difíciles” es el trabajo de un típico cantautor bastante alejado de lo que es rock, al menos estilísticamente. “Mirta, de regreso” se ha convertido en un auténtico éxito, jutificadamente porque es la mejor canción del álbum. Baglietto posee una buena voz que entrega con desgarradora elocuencia; las canciones (que no son de su autoría) reflejan un mundo sórdido, triste, densamente sombrio. Los personajes son siempre perdedores, y una figura se recorta claramente a través de las historias: la muerte.
Nadie puede atreverse a decir que en estos tiempos la música de Baglietto no tenga una razón de ser, pero tal vez tanta desazón y tragedia necesiten de un canto diferente, de un poco de esa estúpida sugestión que llaman esperanza. Tal vez sea sólo un espejismo, pero es que ahora sí hay demasiada muerte como para cantarla.