El músico argentino Nahuel Briones lanzó su nuevo álbum, “Guerrera/Soldado”, acompañado por una revista comic que, además de incluir las letras, muestra las dos caras de un mismo trabajo.
“Es un disco que refleja las enfermedades vinculares del amor romántico atravesado por la visión perturbada, azul, del duelo y un profundo desprecio a las instituciones: entre ellas la Iglesia, las fuerzas de seguridad y el amor como empresa –enumera el cantante y guitarrista-. Odio la palabra ‘conceptual’, lamento profundamente tener que usarla, pero la realidad es que éste es mi primer disco conceptual”.
Briones señala que “Guerrera/Soldado” es el primer trabajo que realiza codo a codo con otra persona (Federico Nicolao, con quien produjo el material) y que en distintos momentos de la grabación tuvo la sensación de estar haciendo un disco de dúo ya que las decisiones, el rumbo del álbum, el audio, y varias cuestiones más, las tomaban juntos.
“Mucha gente ha escrito que éste era mi álbum más solista hasta ahora –señala-. A mí me cuesta verlo así porque en ‘Pera Reflexiva’ me encargué no sólo de tocar casi todos los instrumentos sino también de producirlo y mezclarlo. En este delegué muchísimo, pero quizás justamente ahí esté mi personalidad en el trabajo: haber decidido a quién le delegaba cada actividad, algo que aprendí en mi rol de productor en discos de otros músicos”.
Al momento de componer, ¿qué te gusta priorizar y resaltar más: lo lírico y poético o lo musical?
En general si muestro públicamente una decena de canciones es porque trabajé en más del triple, así que las que quedan son las que considero que tienen más o menos al mismo nivel las músicas y las letras. Laburo al mismo tiempo las letras, las músicas, los arreglos y la interpretación, grabo las canciones muchas veces, hago demos, maquetas, varias versiones, grabaciones de ensayos con el celular, preproducciones en estudio. Para que una canción mía haya llegado a los oídos de otra persona, y esta pueda juzgar si le parece lo más maravilloso, algo simplemente aséptico, o la peor mierda que escuchó en su vida, pasó previamente por una cantidad muy grande de filtros.
¿Evaluaste la posibilidad de editarlo dividido en dos partes y lanzarlo en distintos tiempos?
Evalué esa posibilidad, pero luego de escuchar las canciones de “Guerrera” y las de “Soldado” por separado me pareció que era más interesante lo que sucedía escuchando los temas intercalados. Este es mi disco más corto hasta ahora, así que luego de haber editado dos álbumes de casi una hora y media sin que me preocupara demasiado qué sería de sus vidas una vez que abandonaran mi computadora, editar uno que dura exactamente el tiempo promedio de concentración de los humanos no me pareció que fuera un problema tan serio.
¿Por qué decidiste lanzarlo junto a un libro/comic?
En primer lugar, me seducía la idea de ver a mis dos personajes, Guerrera y Soldado, como tapas de comic más las letras de las canciones ilustradas por el genio de Luciano Vecchio y sumarle fotos de Sofía Martinsen, dos artistas que admiro mucho. En segundo lugar, para trabajar las letras de este disco escribí un montón de textos que luego no se usaron para las canciones; pero como entre todo ese material había dos escritos que me gustaban particularmente, pensé que agregar un par de páginas con historietas le sumaba una parte muy fuerte al concepto de la obra, además de que aportaba mayor información sobre los personajes y abría un poquito la puerta a que se entendieran sus historias personales. Todo el diseño gráfico del libro/cómic fue realizado por Andrew Kskarafia, otro artista enorme de estos tiempos.
¿Es un nuevo mecanismo que te gustaría adoptar para futuros materiales o solo lo ves acorde a este álbum?
Nunca había pensado en editar un cómic hasta que compuse estas canciones y ahí sentí la necesidad de que vinieran empaquetadas en un contexto más poderoso a nivel visual que mis discos anteriores. No sé si lo voy a volver a usar. No estoy cerrado a la posibilidad de que suceda como tampoco a la idea de editar un CD en cajita de plástico o un vinilo o un cassette o un pen drive o sólo un link según lo que considere o sienta que esa nueva obra necesita.
Foto: Sofi?a Martinsen